Todo
quedó congelado por el tiempo,
se
hicieron ruinas mis manos
Y empecé
a delatarme con otras.
Pasaron
esos cuerpos imprecisos,
quemé la
rueda de mis mejores noches,
-eléctrico-
decías, y fue más que eso:
una
huida hacia mi mismo interminable.
Seguramente
ya no baje mis ojos
cuando
me cruce contigo.
He
crecido firme sin ti
apoyado
en la firmeza de mis días
y mi
plato aparte de nostalgias y cometas.
Los días
de lluvia aprendieron a secarse.
Incendios
de nieve nos separan. Nada
arde
eternamente.
Nada se
parece a lo que soñé contigo.
Tenías
razón, me mantuve firme
y por
eso te llené de silencios.
Suena
armónico el desfile
de los
últimos Noviembres.
"Los días de lluvia aprendieron a secarse"
ResponderEliminarTremendo tío, representas mucho cabrón!
Me gusta la imagen de la vela. De dónde la sacaste, quién es el autor.
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